La ansiedad es un sentimiento de preocupación, nerviosismo o malestar por algo con un
resultado incierto.
Esto sitúa a la ansiedad en el ámbito de los pensamientos y sentimientos negativos, para los
que la terapia RTT® es una intervención muy eficaz.
La ansiedad es el síntoma principal de varias afecciones, entre ellas:
1. Trastorno de ansiedad generalizada (TAG)
2. Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
3. Trastorno de pánico (ataques de pánico)
4. Trastorno de ansiedad social (fobia social)
5. Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
6. Ansiedad por la salud (hipocondría)
7. Fobias, como la agorafobia o la claustrofobia
En ocasiones, a algunas personas les resultará difícil controlar sus preocupaciones;
Sus sentimientos de ansiedad no disminuyen y permanecen como una presencia constante,
impactando en su vida diaria.
Síntomas de ansiedad de los que es difícil hablar:
Despersonalización:
Sentirse desconectado de a realidad, de nosotros mismos y de nuestros cuerpos, todo parece y se
siente raro o extraño.
Escapar al baño:
La dependencia excesiva del baño como vía de escape de situaciones en las que la ansiedad aumenta.
Cuando la ansiedad se activa, el apetito se suprime, la garganta está tensa y podemos sentir náuseas,
es peor cuando sentimos presión.
Trastorno de ansiedad generalizada (TAG)
Síntomas del trastorno de ansiedad generalizada puede causar síntomas tanto psicológicos como
físicos.
Estos varían para cada persona, pero pueden incluir:
Sentirse inquieto o preocupado.
Tener problemas para concentrarse o dormir.
Mareos o palpitaciones cardíaca.
Las causas según la opinión médica, es probable que el TAG sea el resultado de
varios factores, entre ellos:
Tener antecedentes de experiencias estresantes o traumáticas, como violencia doméstica,
abuso o acoso escolar.
Tener una afección de salud dolorosa a largo plazo, como artritis.
Tener antecedentes de abuso de drogas o alcohol.
El trastorno de ansiedad generalizada es una afección común y más en las mujeres que los hombres, y la afección es más común en personas entre los 35 a 59 años.
Estrategias prácticas
Escuchar una grabación personalizada
Ejercicios de respiración propios para la ansiedad.
Ejercicio físico regular
Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol, cafeína y azúcar
Meditación, relajación y mindfulness.
2. Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
El trastorno obsesivo compulsivo es la experiencia de pensamientos, sentimientos, imágenes o
sensaciones no deseados pero repetidos que conducen a comportamientos compulsivos o actos
mentales en respuesta.
Síntomas (según la definición del NHS England)
Una persona con TOC suele experimentar pensamientos obsesivos frecuentes y comportamientos
compulsivos.
· Una obsesión es un pensamiento, imagen o impulso no deseado y desagradable, preocupación o
duda que entra repetidamente en la mente, causando sentimientos de ansiedad, malestar mental, disgusto o
malestar.
· Una compulsión es un comportamiento repetitivo o un acto mental que un individuo siente que necesita
hacer para aliviar temporalmente los sentimientos desagradables provocados por el pensamiento obsesivo.
Causas
· Eventos de la vida: el TOC puede ser más común en personas que han sido intimidadas, abusadas
o descuidadas, y a veces comienza después de un evento importante de la vida, como el parto o un duelo.
A menudo hay sentimientos de impotencia, inseguridad o fuera de control.
3. Personalidad:
Las personas ordenadas, meticulosas y metódicas con altos estándares personales pueden ser más
propensas a desarrollar TOC, también las personas que generalmente son bastante ansiosas o tienen un sentido muy fuerte de responsabilidad por sí mismas y por los demás.
Marisa Peer dice que el TOC es un mecanismo de afrontamiento para cuando el cliente no puede controlar
lo que está sucediendo internamente o, a veces, externamente (por ejemplo, cuando un niño no puede
cambiar algo de su entorno emocional o físico).
El TOC puede afectar a hombres, mujeres y niños.
Algunas personas comienzan a tener síntomas temprano, a menudo alrededor de la pubertad, pero
generalmente será durante la edad adulta temprana.
A veces, las mujeres pueden tener TOC durante el embarazo o después del nacimiento de su bebé.
Las obsesiones pueden incluir preocuparse por dañar al bebé o no esterilizar los biberones correctamente.
Las compulsiones pueden ser cosas como comprobar repetidamente que el bebé está respirando.
4. Trastorno de pánico (ataques de pánico)
El trastorno de pánico describe sentimientos de ansiedad, estrés y pánico que ocurren regularmente o
en cualquier momento, a menudo sin razón aparente.
Esto puede dar lugar a ataques de pánico repentinos y repetidos de miedo y malestar intensos que alcanzan
su punto máximo en pocos minutos y tienen asociados síntomas físicos graves.
El pánico es la forma más grave de ansiedad.
Síntomas
Un ataque de pánico crea una oleada de intensos síntomas mentales y físicos.
Puede aparecer muy rápidamente y sin razón aparente. Un ataque de pánico puede ser muy aterrador
y angustiante e incluso hacer que la persona que lo sufre se sienta incapaz de respirar.
La mayoría de los ataques de pánico duran entre 5 y 20 minutos, aunque puede ser más largo.
El número de ataques dependerá de la gravedad de la afección.
Causas
Cualquier persona puede experimentar ataques de pánico, pero es común que comiencen
durante la adolescencia. Es probable que un evento que la persona pueda describir con su
mente lógica como "creador" del ataque de pánico sea en realidad un desencadenante de un
recuerdo mucho más antiguo.
Una vez que ha experimentado un ataque de pánico, generalmente evitará ciertas situaciones
porque teme que provoque otro ataque. Esto puede crear un ciclo de vivir "con miedo al miedo".
Puede aumentar la sensación de pánico y puede causar aún más ataques.
Disrupción:
concentrarse en cualquier cosa física;
Estar en el momento presente y notar las cosas en detalle a tu alrededor.
Respirar lenta y profundamente.
Recordar que pasará y no pone en peligro la vida
4. Trastorno de ansiedad social (fobia social)
El trastorno de ansiedad social (también conocido como fobia social) es un miedo abrumador
y a largo plazo a las situaciones sociales.
Puede presentarse como un miedo persistente, intenso y crónico a ser observado y juzgado por
los demás y a sentirse avergonzado o humillado por las propias acciones.
Puede limitarse a un tipo específico de situación u ocurrir en cualquier tipo de interacción social.
Síntomas
Muchas personas ocasionalmente se preocupan por situaciones sociales, pero alguien con ansiedad social
se siente demasiado preocupado antes, durante y después de ellas.
Es más que timidez; Es un miedo que no desaparece y afecta a las actividades cotidianas, a la confianza
en uno mismo, a las relaciones y a la vida laboral/escolar.
Formas típicas en las que podemos indentificar la ansiedad social:
Preocupaciones sobre las actividades cotidianas, como conocer a extraños, iniciar conversaciones, hablar por teléfono, trabajar o ir de compras, etc.
Evita o se preocupa excesivamente por las actividades sociales, como las conversaciones grupales, comer delante de los demás o asistir a fiestas;
Siempre se preocupan por hacer algo que creen que es vergonzoso, como sonrojarse, sudar o parecer incompetentes
Le resulta difícil hacer cosas cuando otros están mirando (siente que está siendo observado y juzgado todo el tiempo).
Teme ser criticado, evita el contacto visual o tiene baja autoestima
A menudo tiene síntomas como náuseas, sudoración, temblores o palpitaciones en el corazón (palpitaciones)
Tiene ataques de pánico en los que experimentan una abrumadora sensación de miedo y ansiedad.
Esta forma de ansiedad puede conducir al aislamiento social: la persona a menudo está desesperada por participar en actividades sociales, pero las evita porque las emociones asociadas son muy intensas.
Esto puede malinterpretarse como desinterés o falta de fiabilidad y, en consecuencia, las invitaciones pueden agotarse.
La ansiedad social es un problema común que suele comenzar durante la adolescencia.
Para algunas personas, mejora a medida que envejecen.
Para otros, la ansiedad social se relaciona con problemas como la depresión, el trastorno de ansiedad generalizada o el trastorno de pánico.
Ayuda práctica
Ser inquisitivo, pensar o escribir sus pensamientos y comportamientos en ciertas situaciones sociales, llevar un diario puede ser útil.
Ejercicios de respiración y técnicas de relajación.
Dividir las situaciones desafiantes en partes más pequeñas y trabajar para sentirse más relajado con cada parte.
Centrarse en lo que la gente realmente está diciendo, en lugar de asumir lo peor.
5. Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es un trastorno de ansiedad causado por eventos muy estresantes, aterradores o angustiantes.
Las personas que sufren de TEPT a menudo reviven el evento traumático a través de pesadillas y flashbacks, y los experimentan como si estuvieran sucediendo en el momento presente. Esto se debe, en parte, a que no han procesado el trauma de manera efectiva y sigue siendo un "asunto pendiente".
Las personas con TEPT pueden quedarse con emociones y problemas relacionados, como culpa, aislamiento, irritabilidad, insomnio y dificultad para concentrarse porque siempre están en "alerta máxima".
Del mismo modo, el TEPT podría interpretarse como la forma en que la mente minimiza la reexposición asegurándose de que no se acerquen a esas situaciones nuevamente.
De aquellos que experimentan un evento traumático, se estima que 1 de cada 3 desarrollará TEPT.
Síntomas
Los síntomas suelen ser lo suficientemente graves y persistentes como para tener un impacto significativo en la vida cotidiana de la persona.
Los síntomas específicos del TEPT pueden variar ampliamente entre individuos, pero generalmente se clasifican en las categorías que se describen a continuación.
Volver a experimentar es el síntoma más típico del TEPT, que es cuando una persona revive involuntaria y vívidamente el evento traumático en forma de:
Flashbacks
Pesadillas
Imágenes o sensaciones repetitivas y angustiantes
Sensaciones físicas, como dolor, sudoración, sensación de malestar o temblor.
Algunas personas tienen pensamientos negativos constantes sobre su experiencia, haciéndose repetidamente preguntas que les impiden aceptar el evento. Por ejemplo, pueden preguntarse por qué les sucedió el evento y si podrían haber hecho algo para detenerlo, lo que puede generar sentimientos de culpa o vergüenza.
Evitación y adormecimiento emocional
Evitar cualquier escenario que desencadene el evento traumático es otro síntoma clave del TEPT. Esto puede significar evitar a ciertas personas o lugares que les recuerden el trauma, o evitar hablar sobre su experiencia.
Muchas personas con trastorno de estrés postraumático tratan de sacar de su mente los recuerdos del evento, a menudo distrayéndose con el trabajo o los pasatiempos.
Algunas personas intentan lidiar con sus sentimientos tratando de no sentir nada en absoluto.
Esto se conoce como adormecimiento emocional, que puede llevar a la persona a aislarse y retraerse.
Hiperexcitación (sentirse muy "nervioso")
Una persona con trastorno de estrés postraumático puede estar muy ansiosa y tener dificultades para relajarse. Pueden estar constantemente al tanto de las amenazas y asustarse fácilmente.
Este estado mental se conoce como hiperexcitación.
La hiperexcitación a menudo conduce a:
Irritabilidad
Problemas para dormir
Dificultad para concentrarse
Otros problemas:
Muchas personas con trastorno de estrés postraumático también tienen otros problemas, entre ellos:
Otros problemas de salud mental, como depresión, ansiedad o fobias
Comportamiento autolesivo o destructivo, como el uso indebido de drogas o alcohol
Otros síntomas físicos, como dolores de cabeza, mareos, dolores en el pecho y problemas estomacales.
Experiencia vicaria
Como humanos somos animales sociales y la mayoría desarrolla la capacidad de empatizar con los demás.
La experiencia vicaria va más allá y es el fenómeno de observar al otro y sentir lo que siente.
El personal de primera línea, los socorristas y los equipos de emergencia suelen verse afectados.
El COVID-19, la morbilidad, la ansiedad, el miedo y el hecho de ver morir o sentir dolor a alguien han provocado un aumento de los relatos.
La experiencia vicaria es importante porque nos permite aprender y adaptarnos a nuestro entorno sin tener que enfrentar cada situación por nuestra cuenta, y también nos ayuda a desarrollar empatía al comprender los sentimientos o situaciones de los demás.
Causas del trastorno de estrés postraumático (TEPT)
Cualquier situación que una persona encuentre traumática puede causar TEPT.
Esto puede incluir:
Accidentes de tráfico graves
Agresiones personales violentas, como agresión sexual, atraco o robo
Problemas de salud graves
Experiencias de parto
El trastorno de estrés postraumático puede desarrollarse inmediatamente después de que alguien experimenta un evento perturbador, o puede ocurrir semanas, meses o incluso años después.
Trastorno de estrés postraumático complejo (TEPT)
Las personas que experimentan repetidamente situaciones traumáticas, como negligencia grave, abuso o violencia, pueden ser diagnosticadas con TEPT complejo.
El trastorno de estrés postraumático complejo puede causar síntomas similares al trastorno de estrés postraumático y es posible que no se desarrolle hasta años después del evento.
Suele ser más grave si el trauma se experimentó temprano, durante la infancia, ya que esto puede afectar el desarrollo de los niños.
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